Queridos amigos

Bienvenidos a este espacio

La eleccion que tomemos hoy nos permitira crear un nuevo futuro, el acuerdo que realizemos con nuestro yo interior y con Dios nos llevara a la maxima sensacion de felicidad, todo en esta vida es posible.



27 mar 2010

Una bendicion Señor..


Señor...

...Ayúdame a decir la verdad
delante de los fuertes y a no decir
mentiras para ganarme el aplauso
de los débiles.

Si me das fortuna, no me quites la razón.
Si me das éxito, no me quites la
humildad.
Si me das humildad, no me quites
la dignidad.

Ayúdame siempre a ver la otra
cara de la medalla,
no me dejes inculpar de traición
a los demás por no pensar
igual que yo.

Enséñame a querer a la gente
como a mí mismo y a no juzgarme
como a los demás.

No me dejes caer en el orgullo
si triunfo, ni en la
desesperación si fracaso.
Más bien recuérdame que el
fracaso es la experiencia que precede al triunfo.

Enséñame que perdonar
es un signo de grandeza y que la venganza
es una señal de bajeza.

Si me quitas el éxito, déjame
fuerzas para aprender
del fracaso.
Si yo ofendiera a la gente,
dame valor para disculparme
y si la gente me ofende,
dame valor para perdonar.

¡Señor...si yo me olvido de tí,
nunca te olvides de mí!


Mahatma Ghandi

26 mar 2010

Observar el pasado
reflexionar y aprender
para perdonar.

Cada forma de sentir
una nueva manera de descubrir.

Hoy es un buen dia para comenzar


Autor: Martha Valerio...gracias. Musica: Ricardo Arjona




Realmente no estoy Solo


25 mar 2010

Agradece a Dios

Existían millones de estrellas en el cielo, estrellas de todos los colores: blancas, plateadas, verdes, doradas, rojas, azules. Un día, inquietas, ellas se acercaron a Dios y le propusieron:



Señor, nos gustaría vivir en la Tierra, convivir con las personas. Así será hecho, respondió el Señor. Las conservaré a todas ustedes pequeñitas, tal como se ven de lejos, para que puedan bajar a la Tierra.




Se cuenta que en aquella noche hubo una fantástica lluvia de estrellas. Algunas se acurrucaron en las torres de las iglesias, otras fueron a jugar y a correr junto con las luciérnagas por los campos,
otras se mezclaron con los juguetes de los niños. La Tierra quedó, entonces, maravillosamente
iluminada.



Pero con el correr del tiempo, las estrellas decidierón abandonar a los hombres y volver al cielo, dejando a la tierra oscura y triste.




¿ Por qué volvieron ? - preguntó Dios, a medida que ellas iban llegando al cielo. Señor, nos fue imposible permanecer en la Tierra, existe allí mucha miseria, mucha violencia, hay demasiadas injusticias.


El Señor les contestó: - ¡ Claro ! Ustedes pertenecen aquí, al Cielo. La tierra es el lugar de lo transitorio, de aquello que cae, de aquel que yerra, de aquel que muere. Nada es perfecto.


El Cielo es el lugar de lo inmutable, de lo eterno, de la perfección.
Después de que habían llegado gran cantidad de estrellas, Dios verificó la cantidad y habló de nuevo:


Nos está faltando una estrella, ¿dónde estará? Un ángel que estaba cerca replicó:

Hay una estrella que resolvió quedarse entre los hombres. Ella descubrió que su lugar es exactamente donde existe la
imperfección, donde hay límites, donde las cosas no van bien, donde hay dolor.


¿ Qué estrella es esa ? - volvió a preguntar. Es la Esperanza, Señor, la estrella verde.

La única estrella de ese color. Y cuando mirarón para la tierra, la estrella no estaba sola:

la Tierra estaba nuevamente iluminada porque había una estrella verde en el corazón de cada persona.



Porque el único sentimiento que el hombre tiene y Dios no necesita retener es la Esperanza. Dios ya conoce el futuro y la Esperanza es propio de la persona humana, propia de aquel que yerra, de aquel que no es perfecto, de aquel que no sabe como puede conocer el porvenir. Recibe en este momento esta Estrella Verde en tu corazón, la Esperanza.




No dejes que ella huya y no permitas que se aparte. Ten certeza que ella iluminará tu camino, sé siempre positivo y agradece todo a Dios. Se siempre feliz y contagia a otras personas tu felicidad.

23 mar 2010

21 mar 2010










Las relaciones de corazón a corazón son reales, y se manifiestan mas allá de todo tipo de interés personal, de hipocresía, o de sumisión a nuestros egos.